(Miaminews24).- Los padres de una recién nacida que fue sacada de un hospital de Miami por agentes de la Policía de la tribu Miccosukee sin permiso de sus padres para entregársela a una de las abuelas, presentaron hoy una demanda contra esta tribu y la dirección del centro médico, informaron medios locales.
Los padres de la bebé, Justin Johnson y Rebecca Sanders, ella de sangre Miccosukee, acusan a la Policía de la tribu india de «falso encarcelamiento, conspiración y difamación».
La pareja también acusa a la tribu y al hospital Baptist de Kendall, suburbio del condado de Miami-Dade, de «infligirles intencionalmente angustia emocional», recogió el canal Local 10 News.
Sobre el Baptist recaen además acusaciones por negligencia al entregar a Ingrid Ronan Johnson al día siguiente de su nacimiento en marzo pasado a agentes de la reserva Miccosukee que se presentaron con una orden de una corte de la tribu para llevársela, a lo que accedió la dirección médica del hospital.
Los agentes entregaron luego la bebé a Betty Osceola, su abuela materna, quien había pedido al tribunal de la tribu la custodia de la niña.
Según la pareja, se trató de una «farsa inventada» por Osceola porque rechazaba que un «padre blanco fuese parte de la vida de la niña».
Días después, una corte tribal de la reserva, que se ubica en los Everglades, aceptó finalmente, tras una «sesión de horas», que la bebé fuese devuelta a sus progenitores, como así se hizo.
El caso impactó la opinión pública hasta el punto que llegó a movilizar al senador por Florida Marco Rubio, quien señaló en su cuenta de Twitter entonces que la «Policía de la tribu Miccosukee había usado una orden de la corte para secuestrar a una bebé de sus padres en un hospital de Miami».
Sin embargo, los miembros del consejo de negocios de los Miccosukee defendieron las acciones de la tribu con el argumento de que el departamento de servicio sociales actuó «con la cooperación y participación de la Policía de Miami-Dade y el personal de hospital Baptist», por lo que la orden del tribunal tribal fue «apropiada».
Tanto el senador Rubio como el departamento de la Policía de Miami-Dade han impugnado partes de la declaración, y arguyen que los policías de Miami-Dade se personaron en el hospital «a petición de un sargento de la tribu que supuestamente dijo que necesitaba a los agentes para ayudar a ‘mantener la paz’ y hacer cumplir una orden federal, no una orden tribal», agregó el medio.
Los Miccosukee dicen que «secuestraron al bebé para protegerlo de un padre abusivo; pero, por qué se lo arrancaron a la madre? La corte tribal no tiene jurisdicción fuera de la reserva sin la aprobación de un tribunal federal o estatal», señaló Rubio antes de que el bebé fuese devuelto a sus padres.
La Tribu Miccosukee de indios de la Florida celebra con orgullo y
se esfuerza por mantener con la comunidad local. pic.twitter.com/DrRibokFpd— José Caruci (@JoseFCaruci) September 27, 2015
Pese a la reclamación de los padres contra Osceola, la tribu citó una orden de protección de violencia doméstica contra Johnson, entre otras, para respaldar los temores de la abuela materna y la petición de custodia de la bebé.
Se trata de un incidente que pone a prueba los límites de la jurisdicción y extensión del estatus de nación soberana que disfruta la tribu de los Miccosukee en el estado de Florida.
El hospital, por su parte, ha declinado hacer algún tipo de comentario al tratarse de un asunto que afecta a las leyes federales de privacidad del paciente.
Los miccosukees viven en gran parte, como muchas otras tribus en EE.UU, de la explotación de casinos y cuentan con inmunidad soberana en sus reservas.
Con información de DBT.
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