(Miaminews24).- Tras la aprobación de nuevos aranceles por parte de Estados Unidos a China; el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, ha indicado que es optimista para alcanzar un acuerdo con el gigante asiático para evitar un enfrentamiento comercial.
La administración de Trump pretende arrancar el compromiso chino de reducir el déficit comercial en 100,000 millones de dólares con una reducción de los aranceles en automóviles estadounidenses, más exportaciones de semiconductores y un mayor acceso al sector financiero de China por parte de compañías estadounidenses. Corea del Sur logra quedar eximida de los aranceles al acero, a cambio de fijar una cuota para sus importaciones a Estados Unidos.
El secretario del Tesoro de Estados Unidos ha reconocido en una entrevista en Fox News este domingo que mantienen «conversaciones productivas» con China y declara que está esperanzado en llegar a un acuerdo. Las palabras de Mncuchin se producen después de que Trump anunciara aranceles específicos para productos chinos, multas y denuncias ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) por supuestas violaciones de leyes comerciales por valor de 60,000 millones de dólares.
El mismo día Trump indicó a Mnuchin que proponga nuevas restricciones de inversión a las compañías chinas en un plazo de 60 días para proteger sus tecnologías estratégicas. El presidente de Estados Unidos ha reconocido públicamente que el objetivo es reducir en 100,000 millones de dólares el déficit comercial con China.
Tras la firma del presidente, China respondió con el anuncio imponer aranceles de hasta 3,000 millones de dólares a las importaciones de algunos productos de Estados Unidos para compensar las pérdidas causadas por los aranceles impuestos por acero y aluminio de China.
La prensa china comenzó a publicar la larga lista de opciones que para aumentar las represalias, si las tensiones con Estados Unidos se agravan. Pekín podría cancelar esas órdenes para entregárselas a rivales como Airbus, frenar la comprar de automóviles y de iPhones.
Puntos de acuerdo
Mnuchin ha asegurado en la entrevista que los dos países están de acuerdo en «reducir el déficit hasta cierto punto» y «estamos tratando de llegar a un acuerdo para un comercio justo, que suponga abrir sus mercados, reducir sus aranceles» y frenar lo que considera Estados Unidos «transferencia forzada de tecnología».
Tanto Mnuchin como el responsable de Comercio, Robert Lighthizer, detallaron una lista de demandas específicas a China para detener la batería de medidas arancelarias, según informa The Wall Street Journal. Entre las peticiones se incluyen reducción de impuestos sobre coches americanos, aumento de compras de semiconductores estadounidenses y un mayor acceso al sector financiero de China. Mnuchin está estudiando a viajar a China para negociar las condiciones en persona. Estados Unidos procederá a aplicar los aranceles «a menos que tengamos un acuerdo aceptable en el que el presidente dé su aprobación», ha subrayado Mnuchin.
La lista de productos específicos no menciona a la soja ni a los aviones, por cuantía los dos artículos de Estados Unidos más exportados a China. Washington pretende que los vehículos estadounidenses tengan mejores condiciones para entrar en el mercado chino. Actualmente, soportan un arancel del 25%. Pese a ello, los automóviles son el tercer producto con mayor peso de las importaciones que realiza China desde Estados Unidos. En 2017, alcanzaron los 10,600 millones, aumentando el saldo un 8% respecto a 2016.
Por su parte, de semiconductores de Estados Unidos, China compró el año pasado 2,600 millones de dólares, que solo suponen el 1% de las importaciones totales de este producto que realizó el gigante asiático el año pasado.
«No tememos una guerra comercial, no es nuestro objetivo», pero ha añadido que están dispuestos a tomar medidas. Hasta ahora, Trump ha decidido dejar fuera de las medidas comerciales a sus socios norteamericanos -Canadá y México-, así como a los países de la Unión Europea (UE), a Australia, Brasil y Argentina, con los impuestos de acero y aluminio.
El último país en acogerse a las exenciones ha sido Corea del Sur, mientras los dos países renegocian el tratado de libre comercio entre ambos países (KORUS FTA, por sus siglas en inglés).
Mnuchin ha señalado que no espera ver un gran impacto en la economía después de la entrada en vigor de las controvertidas tarifas proteccionistas.
«No espero ver un gran impacto en la economía. Pero nuevamente, creo que lo que estamos haciendo es, a largo plazo, muy bueno para la economía», ha indicado Mnuchin.
Fuente: El Economista de América