(Miaminews24).- «Probablemente en contra de mi mejor interés personal, permaneceré en Miami-Dade como su superintendente», dijo Carvalho ante un auditorio que estalló en aplausos.
Nacido en Portugal y llegado a los 17 años a Estados Unidos, donde algún tiempo vivió como indocumentado, el superintendente hizo ese anuncio en una reunión de emergencia de la dirección del distrito escolar de Miami-Dade, para tratar de la oferta que recibió de la alcaldía de Nueva York.
El miércoles el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, anunció que la dirección del Departamento de Educación de Nueva York recaería en manos de Carvalho, «un educador de clase mundial con un récord exitoso inigualable»
Carvalho, que a su llegada al país trabajó en diferentes oficios como lavaplatos y en la construcción, iba a reemplazar a Carmen Fariñas, de 74 años y origen español, actual directora del departamento neoyorquino, quien meses atrás había anunciado su retiro.
En la reunión de emergencia, durante la que el educador pidió hasta dos recesos, en los que presumiblemente en uno de ellos llamó a Di Blasio, confesó que no sabría «cómo romper una promesa a un niño, cómo romper una promesa a una comunidad».
En unas posteriores declaraciones a los periodistas, Carvalho, nombrado en 2014 el Superintendente Nacional del Año, confesó que pesó en su decisión no solo los pedidos de sus estudiantes y colegas sino de dos indocumentados, quienes lo llamaron y le expresaron su incertidumbre sobre su futuro si es que él dejaba el cargo.
Agregó que telefoneó al alcalde de Nueva York para informarle de su decisión y que, en una conversación «profesional», pero «difícil», éste se mostró «apenado de que nuestra breve amistad no haya tenido la oportunidad de desarrollarse».
Conocida la decisión, el secretario de prensa de la Alcaldía de Nueva York, Eric Phillips, expresó en su cuenta de Twitter su decepción por el repentino cambio de parecer de Carvalho, quien semanas atrás ya había aceptado la jefatura del sistema público escolar de Nueva York, el más grande de Estados Unidos con una población de 1,1 millón de estudiantes.
Carvalho iba a percibir un salario anual de 353.000 dólares, prácticamente el mismo que recibe en Miami-Dade
«¿Quién volvería a contratar a este tipo otra vez? ¿Quién votaría por él?», se preguntó Phillips, quien agregó que el alcalde Bill de Blasio ofrecerá una rueda de prensa en el transcurso del día.
Desde 2008 al frente del distrito escolar de Miami-Dade, el cuarto más grande del país y que sirve a una población de 345.000 estudiantes, Carvalho logró incrementar las tasas de graduación escolar desde el 60,5 % del ciclo 2007-2008 al 80,7 % del ciclo 2016-2017.
Fundador de la escuela IPreparatory Academy, en la que los alumnos tienen libertad para estudiar a su propio ritmo y bajo la guía de maestros y de una programa curricular online, el educador inició su trayectoria como profesor de cálculo, física y química en una secundaria local.
A su llegada a este país se estableció primero en Nueva York, donde pasó al estatus de indocumentado una vez que se venció su visa y trabajó como lavaplatos y en diferentes oficios en hostelería.
Posteriormente se trasladó a Miami, donde trabajó en la construcción y, tras lograr una visa de estudiante, posteriormente hizo toda su carrera educativa en el sistema escolar de Miami-Dade, hasta llegar al cargo actual de superintendente.
Sucedió en el puesto a Rudy Crew, un exjefe del Departamento de Educación de Nueva York.
En más de una ocasión la prensa de Florida ha apuntado que podría ser candidato a congresista en Washington.
Fuente: EFE
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