(Miaminews24).- Después del tiroteo en la escuela Marjory Stoneman Douglas, en el que murieron 17 personas el pasado Día de San Valentín, el gobernador de Florida, Rick Scott, reafirmó en Miami su intención de reforzar la seguridad en los planteles educativos y destinar recursos para programas de salud de mental, en vez de armar a los maestros como sugiere el presidente Donald Trump.
Durante una rueda de prensa en la jefatura de la Policía de Miami-Dade, el titular del Gobierno estatal dijo que la iniciativa que se propone sacar adelante tendría un costo de 500 millones de dólares y giraría sobre un eje de cinco puntos básicos para hacer más seguras las escuelas de la Florida.
Para Scott, el fortalecimiento de las restricciones en la compra y posesión de armas por parte de personas con problemas mentales es importante. “Creo que todos los que somos elegidos por la ciudadanía sabemos que parte de nuestro trabajo es asegurarnos de que cada persona en nuestro estado se sienta segura», afirmó Scott.
Y agregó: “Necesitamos aprobar reformas para que sea virtualmente imposible a cualquier persona que tenga una enfermedad mental o que represente un peligro para sí misma, usar una pistola”.
Pero, de acuerdo con el propósito de Scott, el estado no limitaría el contacto con las armas a personas que afrontan enfermedades mentales sin antes darles una ayuda, y en el caso de las escuelas habló de la necesidad de aumentar el número de consejeros de salud mental.
“Quiero asegurarme de que tengamos una mayor presencia de consejeros de salud mental en nuestras escuelas. Quiero asegurarme de que cada alumno tenga la oportunidad de sentarse con un consejero de salud mental y, con un poco de suerte, lidiar con cualquier problema que puedan estar teniendo”, afirmó.
A la pregunta de si estaba apartándose de la propuesta del presidente Donald Trump, consistente en armar a maestros y otros empleados de los centros educativos, el gobernador solo dijo que “en este momento estoy enfocado en el tema de la seguridad de las escuelas”.
Dijo que otro punto relevante dentro del plan es asegurar que exista una línea de comunicación clara entre las escuelas y las fuerzas del orden público, integrando también a las agencias que trabajan para ayudar a los niños.
Al respecto, Scott fue enfático al señalar que “necesitamos aumentar la colaboración entre nuestros departamentos de Policía, nuestras escuelas y el Departamento de Niños y Familias”, y dijo que se hace imperioso que haya oficiales de la ley en todas las escuelas públicas.
La iniciativa del gobernador de la Florida se anuncia dos semanas antes de que finalice la legislatura del estado.
No obstante, legisladores demócratas creen que la propuesta “se queda muy corta” porque la verificación de antecedentes planteada no es suficiente, ni considera la prohibición de la venta de armas de asalto.
“La gente pide prohibición de armas de asalto. Eso es lo que los estudiantes quieren, lo que quieren los maestros, los sobrevivientes de las matanzas de Parkland y Pulse y cualquier otro tiroteo que hayamos tenido en la Florida”, declaró el representante demócrata Carlos G. Smith, de Orlando, a al prensa el viernes pasado.