(Miaminews24).- Cuando Carol y Eugene Barrington subieron a un taxi amarillo después de hacer la cola para tomar un taxi en el Aeropuerto Internacional de Miami (MIA) el 13 de septiembre de 2017, no le prestaron atención al número de la licencia ni al nombre del conductor. ¿Por qué debían hacerlo?, dirían más tarde. Solo estaban contentos de estar de vacaciones.
“Éramos turistas que iban en un taxi al hotel. No sabíamos nada más”, dijo Carol Barrington. Durante unos 45 minutos, la pareja se relajó en el asiento trasero del taxi sin saber que el taxista les cobraría más de $35 por milla, lo que equivale a unos $17 por minuto. Vale señalar que la tarifa regular es de $2.40 por milla, con $0.40 por minuto por tiempo de espera.
Ya los Barrington habían sufrido los embates de la mala suerte, cuando el huracán Harvey dañó considerablemente su casa de Houston y, luego Irma arrasó con el sur de la Florida tres días antes de sus vacaciones a Miami. Sin embargo, su crucero en el barco Celebrity Equinox no se canceló, y tenían un día para recorrer Miami antes de volver a zarpar. Todo indicaba que su suerte estaba mejorando.
No fue hasta después que terminaron sus vacaciones que Carol Barrington verificó el estado de cuenta de su tarjeta de crédito y se percató de que había un cargo de $777.44 con fecha 13 de septiembre. Fue el viaje en taxi —tarifa, propina e impuestos— entre el aeropuerto de Miami y el hotel Crowne Plaza en Hallandale Beach, un viaje que le debió haber costado cerca de $70 y que no incluía impuestos.
Aunque es realmente único por la exorbitante tarifa que se le cobró, la historia del matrimonio Barrington no hace sino reflejar las 114 quejas de pasajeros pór cargos excesivos contra los taxistas de Miami-Dade entre el 1ro. de enero de 2017, y la semana pasada. Algunas quejas argumentan que se les cobró precios abusivos, a veces más de $100. Con gran frecuencia, los casos se han cerrado por “insuficiente información”.
Con información de ENH.
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