(Miaminews24).- La Cámara Alta de Estados Unidos aprobó hoy la renovación por seis años de la Ley de Vigilancia de Inteligencia Extranjera (FISA, por sus siglas en inglés), que permite recolectar información digital de extranjeros.
Con un margen de 65 votos a favor y 34 en contra, el Senado autorizó la extensión del programa, que ahora debe recibir el beneplácito del presidente del país, Donald Trump, antes de que caduque su validez mañana viernes 19 de enero.
En el Senado, los republicanos gozan de una leve mayoría con un margen de 51 a 49 sobre los demócratas.
La votación de hoy se produjo después de que el pasado 11 de enero la Cámara de Representantes también aprobara la propuesta con 265 votos a favor y 164 en contra.
Entonces, la votación estuvo marcada por unos sorprendentes mensajes de Trump en Twitter, ya que en un primer momento el mandatario pareció mostrar su rechazo a la ley al asegurar que pudo haber sido utilizada para espiar con malas intenciones su campaña presidencial en 2016.
Sin embargo, minutos después afirmó que «el voto de hoy es sobre tipos malos extranjeros en territorio extranjero» y «necesitamos» el programa.
Ambas votaciones hacen referencia a la Sección 702 de la FISA, a través de la cual la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) recoge datos sin necesidad de una orden judicial sobre las comunicaciones digitales de extranjeros fuera del país, incluidas aquellas con ciudadanos estadounidenses.
El presidente de la Cámara Baja, Paul Ryan, afirmó hoy que el voto es «una victoria en la lucha contra el terrorismo» y argumentó que esa es la razón por la esta legislación otorga al servicio de inteligencia «las herramientas necesarias para apuntar a terroristas extranjeros», que -comentó- «ya ha salvado incontables vidas».
Las filtraciones sobre el tema del exespía Edward Snowden en 2013 a razón de las implicaciones sobre el derecho a la privacidad de las personas puso el foco sobre el programa, que recibió numerosas críticas por asociaciones defensoras de los derechos civiles.
En esta línea, Snowden dijo en su perfil de Twitter que la renovación autorizaría a la Casa Blanca a continuar con la monitorización «ilegal e inconstitucional» sobre las comunicaciones domésticas durante los próximos seis años y pidió a la población que protestara ante los legisladores para defender la cuarta enmienda, que protege el derecho a la privacidad.
Fuente: EFE