Proyecto de ley de Rubio penaliza interferencia rusa en elecciones futuras en EEUU

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(Miaminews24).- Los senadores federales Marco Rubio y Chris Van Hollen tienen un mensaje para Moscú: Cualquier interferencia en elecciones futuras en Estados Unidos será enfrentada con penalidades.

El republicano por la Florida, quien se postuló a la presidencia en el 2016, y el demócrata por Maryland, presentarán el martes un proyecto de ley que establece explícitamente penalidades al gobierno ruso —y a otros países— si interfieren en elecciones federales, y ordena al director de Inteligencia Nacional emitir un informe sobre interferencia potencial en elecciones en los 30 días siguientes a cualquier elección federal.

La iniciativa de ley de Rubio y Van Hollen se presenta en momentos en que el presidente Donald Trump ha calificado de una “cacería de brujas” liderada por los demócratas dos investigaciones del Congreso sobre la interferencia rusa en las elecciones presidenciales del 2016, y crea dudas sobre la pesquisa del fiscal especial Robert Mueller, que ya ha encausado a dos ex funcionarios de la campaña de Trump, entre ellos el ex asesor de Seguridad Nacional Michael Flynn.

“Durante 11 meses han proyectado esta nube falsa sobre este gobierno, y eso ha afectado a nuestro gobierno”, dijo Trump. “Es un engaño demócrata al que han echado mano como excusa por perder las elecciones”.

Pero en momentos que algunos republicanos se han unido a Trump en el cuestionamiento de los motivos de Mueller, Rubio ha expresado confianza en la pesquisa del fiscal especial y sigue alegando que la interferencia rusa es una amenaza para elecciones futuras en Estados Unidos. Un informe del director de Inteligencia Nacional del 2017 determinó que el presidente ruso Vladimir Putin y el gobierno ruso “aspiraban a mejorar siempre que fuera posible las oportunidades del [entonces] presidente electo Trump desacreditando a la secretaria [Hillary] Clinton y contrastándola desfavorablemente con él”.

El proyecto de ley de Rubio y Van Hollen, llamado Ley DETER es la primera iniciativa de ley desde la elección presidencial del 2016 que establece penalidades específicas contra el gobierno ruso y otros países que interfieran en las campañas políticas en Estados Unidos.

“No podemos ser un país en que las agencias de inteligencia de otros países intenten influir nuestro proceso político y no haya consecuencias”, dijo Rubio en un comunicado. “Este proyecto de ley ayudará a asegurar la integridad de nuestro proceso electoral usando herramientas clave de seguridad nacional para disuadir a potencias extranjeras de interferir en nuestras elecciones”.

Si se aprueba, el proyecto de ley establece penalidades específicas contra Rusia que deben implementarse en los 10 días siguientes de que el director de Inteligencia Nacional determine que hubo interferencia.

La penalidades incluyen “sanciones a los principales sectores de la economía rusa, como finanzas, energía, defensa y metales y minería” y sanciones contra todas las figuras políticas de alto nivel y oligarcas rusos identificados en la ley de sanciones a ese país aprobada en el 2017 por encima de las objeciones iniciales de Trump.

También exige a la Casa Blanca trabajar con la Unión Europea para conseguir el apoyo de sus países para imponer sanciones adicionales, de manera que cualquier medida tomada por Estados Unidos tenga un mayor impacto.

“Proteger la integridad de nuestras elecciones es un asunto que no tiene que ver con los partidos”, dijo Van Hollen en un comunicado. “Y en momentos que falta menos de un año para las elecciones legislativas del 2018, no tenemos tiempo que perder. La Ley DETER envía un mensaje inequívoco a Rusia y a cualquier otro país que trate de seguir su ejemplo: si nos atacan, las consecuencias serán severas”.

El proyecto de ley describe medidas específicas de gobiernos extranjeros que se consideran interferencia electoral. Los gobiernos extranjeros tienen prohibido comprar publicidad para influir sobre las elecciones, usar medios sociales y tradicionales para propagar “cantidades significativas” de información falsa, penetrar ilegalmente infraestructura de campaña, como bases de datos de inscripción de electores y cuentas de correo electrónico de campaña, y bloquear el acceso a infraestructura electoral, como páginas digitales que ofrecen información sobre los lugares de votación.

Si se aprueba el proyecto de ley, la Casa Blanca también debe entregar al Congreso un plan para evitar la interferencia electoral en Estados Unidos por parte de China, Irán y Corea del Norte, tres países identificados por el director de Inteligencia Nacional como fuente de amenazas potenciales de ataques cibernéticos en elecciones futuras en Estados Unidos.

“Sabemos que Rusia manipuló canales de medios sociales y penetró comités políticos de campaña y juntas electorales locales para socavar nuestro proceso democrático en el 2016”, expresa una nota de prensa de Rubio y Van Hollen. “Cabe esperar que esa amenaza aumente en el futuro y tenemos que hacer todo lo posible para evitar esos ataques. La Ley DETER usa herramientas clave de seguridad nacional para disuadir a potencias extranjeras hostiles de interferir en nuestras elecciones al asegurar que conozcan de antemano que el costo supera los beneficios”.

Fuente: Miami Herald

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