(Miaminews24).- Cuando varios agentes de policía acudieron al lugar donde estaba el cuerpo de Bethany Lynn Stephens en una zona boscosa de Estados Unidos, quedaron petrificados por el horror de la escena: los dos perros de la raza pit bull de la joven habían devorado su caja torácica.
El padre de Stephens,la encontró la semana pasada en un área de Goochland, Virginia, donde su hija solía llevar a sus caninos a dar un paseo, y de inmediato llamó a las autoridades, reportó el diario Sacramento Bee.
El hombre salió en su búsqueda después de no haberla visto en más de un día y al localizarla encontró a los perros custodiando el cuerpo.
Dos pit bulls de su propiedad
“Fue un ataque absolutamente espeluznante. En mis 40 años como agente de la ley nunca había visto algo así. Espero nunca volver a ver algo así”, dijo el alguacil de condado Goochland, James Agnew, al relatar la sangrienta escena.
Los perros de más de 100 libras cada uno mataron, desmembraron y devoraron partes del cuerpo de Stephens, según las evidencias recabadas en el lugar y el informe de la autopsia.
Los policías tardaron ocho horas en recopilar más de 60 pruebas esparcidas por el lugar, incluidas las prendas de vestir de la joven, informó Richmond.com. Y de acuerdo con WIRC, también tomó algo de tiempo para que funcionarios de la agencia de control de animales tranquilizaran a los pit Bulls.
¿Qué ocasionó el ataque? Hasta el momento las autoridades lo desconocen. Tampoco creen que se trate de un asesinato o de la agresión de otro animal, como algunos amigos de la joven sospechaban.
“No había evidencia de ningún animal más grande allí”, dijo Agnew durante una conferencia de prensa, en respuesta a la creencia generalizada de que tal vez Stephens fue atacada por un animal salvaje.
El cuerpo tampoco tenía señales de estrangulamiento
“La primera lesión traumática fue en su garganta y su rostro”, detalló el alguacil. “Parece que (los perros) la tiraron al suelo, perdió el conocimiento” y la atacaron “hasta matarla”. El cráneo tenía heridas punzantes, según NBC12.
El afiliado de CBS News WTVR-TV informó que el médico forense concluyó que tampoco hubo asalto sexual.
Agnew informó que las autoridades “todavía están haciendo pruebas forenses”. Se espera que un informe de toxicología que esté listo en unos tres meses.
A los perros se les aplicó la eutanasia y los restos serán sometidos a una prueba de toxicología.
“La familia está devastada”, dijo Agnew.
Fuente: El Nuevo Herald
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