(Miaminews24).- Después de años de estar protegidos de la deportación en Estados Unidos mientras su país se recupera del devastador terremoto del 2010, decenas de miles de haitianos perderán ahora esa protección.
El Estatus Temporal de Protección (TPS) será revocado a por lo menos 50,000 haitianos que viven y trabajan en Miami y el resto de Estados Unidos.
La protección expirará el 22 de julio del 2019, lo que da a los haitianos 18 meses para regresar a su país o legalizar su estatus en Estados Unidos. Al final de ese período, los haitianos regresarán al estatus migratorio que tenían anteriormente, y podrían estar expuestos a ser detenidos y deportados.
La decisión ocurre 14 días después que el Departamento de Seguridad Nacional anunció que eliminaba el TPS para 2,500 nicaragüenses y demoraba una decisión sobre 57,000 hondureños, que automáticamente les daba una prórroga de seis meses después que su estatus actual expire en enero.
El anuncio, aunque bienvenido por los que mantienen una postura de línea dura sobre la inmigración, quienes alegan que la protección nunca tuvo el objetivo de ser permanente, es un duro golpe a los haitianos y defensores de los inmigrantes. Durante meses han cabildeado al gobierno del presidente Donald Trump para que prorrogara el estatus al menos 18 meses. El estatus debía expirar el 22 de enero.
“Haití no está listo para recibir a 58,000 personas”, dijo Marleine Bastien, activista haitiana del sur de la Florida quien presionó por la prórroga de 18 meses del TPS.
“Va a ser un desastre para 58,000 familias haitianas en Estados Unidos y un desastre para Haití. Queda claro que no han tomado las decisiones sobre la base de los hechos en el terreno, sino sobre la base de la política. Esto es totalmente inaceptable”.
Promulgado en 1990, el TPS permite a personas de países que sufren de guerra civil o desastres naturales y que ya están en Estados Unidos, permanecer temporalmente y trabajar en el país. Pero Trump ha prometido repetidas veces imponer mayores controles migratorios, y muchos de sus partidarios dicen que el programa ha sido objeto de abusos. El Congreso, dicen los críticos del programa, tiene que ofrecer una solución permanente para los más de 300,000 haitianos y centroamericanos protegidos por el TPS en Estados Unidos.
Según un estudio reciente del Center for Migration Studies, la mayoría de los haitianos acogidos al TPS llevan viviendo en Estados Unidos 13 años y tienen 27,000 hijos nacidos en Estados Unidos. Más del 80% tienen empleo y 6,200 tienen hipotecas.
Los defensores del TPS han mantenido que eliminar el programa sería cruel con las familias y causaría divisiones. Agregan que Haití no se ha recuperado lo suficiente del terremoto del 2010 para aceptar el regreso de tantas personas.
Fuente: Miami Herald