(Miaminews24).- Gracias a su eficiente desarrollo tecnológico, Estados Unidos se convertirá en el primer productor mundial de gas y petróleo de aquí a 2040, cuando la energía solar experimentará asimismo un inédito auge, indicó hoy
La AIE presentó en Londres su informe anual Perspectivas para la energía mundial 2017, en el que predice además que la demanda global de energía se expandirá en el periodo un 30%, un ritmo inferior que hasta ahora pero equivalente a añadir «otra India y otra China» a la actual demanda.
Además de la preponderancia de Estados Unidos, otros factores que contribuirán a un «cambio radical» en el mercado energético son el abaratamiento de las energías renovables, especialmente la solar; el creciente dominio de la electricidad -en parte por la digitalización de la economía- y la apuesta de China por las energías limpias. El director ejecutivo de la AIE, Fatih Birol, anticipó que a mediados de la década de 2020 Estados Unidos será el «líder indiscutible» en la producción de crudo gracias a su «eficiente» explotación de los yacimientos de lutita, «incluso en un contexto de bajos precios».
17 millones de barriles al día
El organismo prevé que en 2030 el país producirá en torno a 17 millones de barriles por día (mb/d), de los actuales 9 mb/d, «el mayor crecimiento en la historia», que se verá acompañado de un aumento del 30% en la producción de gas. Birol subrayó que, aunque Estados Unidos se afianzará como mayor productor de petróleo, la región de Oriente Medio y, en concreto, Arabia Saudí, se mantendrán como los principales exportadores, si bien su petróleo se redirigirá hacia Asia.
A preguntas de la prensa, opinó que el reequilibrio del mercado «es una buena noticia» desde el punto de vista geopolítico, pues, aunque la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) mantendrá su influencia, existirá «más flexibilidad y diversificación» de suministro.
En su informe, la AIE, que representa a 29 Estados miembros, anticipa que en los próximos 25 años el mercado energético estará marcado por «cambios sin precedentes», como el hecho de que un 85% de la nueva demanda energética se abastecerá a través de fuentes de bajo carbono (un 40% renovables) y gas natural.
El organismo prevé que la demanda de electricidad crezca a un ritmo dos veces superior que el de la demanda general de energía, y, «por primera vez en la historia, se gastará más en electricidad que en petróleo». Según Laura Cozzi, una de las autoras del estudio presentado hoy, «la electrificación» del mercado energético se debe a que «cada vez la gente tiene más electrodomésticos y aparatos inteligentes», así como «a la demanda de aire acondicionado sobre todo en China e India, a los coches eléctricos y a los motores industriales».
Habrá unos 300 millones de coches eléctricos
Se calcula que en 2040 habrá unos 300 millones de coches eléctricos en el mundo, un cifra creciente pero relativamente pequeña comparada con una flota total de vehículos estimada en unos 2,000 millones.
La AIE dijo que buena parte de los cambios en el mercado de la energía se producirán por la reorientación de la economía de China -primer consumidor mundial-, que ha pasado de promover la industria a potenciar el sector de los servicios, mientras que ha aumentado la inversión en energías renovables para combatir la polución ambiental.
Pese al incremento de las energías limpias en los próximos 25 años, el petróleo seguirá siendo «un combustible importante», con una demanda prevista de 105 mb/d en 2040, debido a que abastece a los sectores de la aviación, el transporte en camión y marítimo y la industria petroquímica, señaló Birol.
Un aumento de la demanda energética del 3.4%
En cuanto al aumento de la demanda energética global, la Agencia lo atribuye a la expansión de la economía mundial en un 3.4 % anual, el aumento de la población de 7,400 a 9,000 millones de personas en 2040 y al proceso de urbanización del planeta, que aporta al mundo «una ciudad del tamaño de Shanghái (China) cada cuatro meses».
La mayor contribución al aumento de esa demanda procederá de la India, cuyas necesidades energéticas crecen un 11%, hasta suponer el 30% del total, explica la organización.