(Miaminews24).- Dos meses después que el huracán Irma pasó por el sur de la Florida, la limpieza de escombros ha sido lenta pero constante en la mayor parte de Miami-Dade, pero miles de propietarios de viviendas todavía tienen que lidiar con desechos que la mayor parte de la gente no puede ver.
La razón es que estas personas viven en vías privadas y en comunidades que tienen que otorgar un permiso especial al condado para limpiar sus calles, según las directrices federales.
La autoridades condales han presionado desde finales de septiembre para pedir a los administradores de propiedades y asociaciones de propietarios —un grupo de unos 75,000 propietarios en 1,600 millas de calles privadas— que firmen una exención que permita a las cuadrillas del condado y contratistas entrar a las calles privadas para llevarse los desechos. La fecha tope para presentar la exención es el 17 de noviembre.
Ese permiso especial lo exigen las normas de la FEMA, y como la mayoría de las jurisdicciones, el condado quiere seguir esas directrices para que le reembolsen los millones de dólares que se han invertido en las labores de limpieza.
“Tenemos 400 vías privadas y estamos tratando de conseguir la información para poder enviar a nuestros contratistas”, dijo Mike Hernández, portavoz del alcalde condal Carlos Giménez.
Gayle Love, portavoz del Departamento de Recogida de Basura de Miami-Dade, dijo que las autoridades trataron de convencer a la FEMA de que normalmente prestan servicios en esas zonas, pero la agencia se negó a obviar el permiso de los propietarios.
“Este proceso lleva trabajo. Para algunas personas puede demorar un poco más, pero hay directrices y tenemos que cumplirlas”, dijo Love.
Muchas asociaciones han firmado las exenciones o contratado a su propio personal para la limpieza, dijo Love, quien mencionó ciertas áreas de Doral y Miami Lakes, pero ha habido alguna oposición.
María Luisa Castellanos, miembro de la junta directiva de la asociación de propietarios de Greenway Lakes en el suroeste de Miami-Dade, dijo que su asociación no va a firmar la exención. Ella piensa que eso le da demasiado margen a los contratistas si algo sale mal durante la limpieza.
El formulario del “derecho de entrada” tiene una cláusula que dice que “los propietarios y agentes aceptan liberar de toda responsabilidad a los gobiernos y contratistas por cualquier tipo de daño” a la propiedad y por lesiones graves.
“Si uno de estos camiones arrolla a tres niños y un perro, ¿cómo vamos a liberarlos de esa responsabilidad?”, dijo Castellanos. “No vamos a firmar algo que nos hace responsables”.
Mientras los desechos siguen acumulándose en su vecindario, Castellanos dijo que el hecho de que condado quiera que le reembolsen los gastos no debe tener más importancia que el servicio a los habitantes.
“Nos están afectando solamente porque quieren ahorrar dinero”, dijo Castellanos.
Los comisionados Daniella Levine-Cava y Joe Martínez (cuyos distritos incluyen el vecindario de Castellanos), dijeron que no han escuchado de mucha oposición a las exenciones y esperan que más asociaciones firmen para la fecha tope del 17 de noviembre. Sus distritos incluyen grandes concentraciones de zonas donde la limpieza no ha concluido, según un mapa del condado.
“La clave es que si uno no quiere firmar, tiene que limpiar sus propios desechos”, dijo Martínez.
Castellanos dijo que su asociación estaría dispuesta a firmar la exención después de la limpieza, pero no antes. La limpieza de escombros sigue siendo un problema para los vecinos y se espera que la mayoría de las zonas queden limpias antes del final de la temporada navideña. Las autoridades en ciudades de todo el condado han señalado lo estricto de las directrices de la FEMA y la dificultad para conseguir cuadrillas como parte de las razones del atraso.
La enorme labor de limpieza en el condado ha incluido el acarreo de 3.7 millones de yardas cúbicas de desechos.
Fuente: Lance Dixon/ Miami Herald