(Miaminews24).- El aumento de la delincuencia en Miami Beach ha llevado a la toma de algunas medidas en los últimos meses con el fin de combatir el fenómeno: entre ellas se encuentran la limitación en la venta de alcohol y el cierre de las playas más temprano.
El más reciente esfuerzo por frenar el incremento de la criminalidad en la zona ha llevado a instalar cámaras de vigilancia a lo largo del paseo Ocean Drive, desde Fifth hasta 15th Streets, y planean ampliar el área de cobertura en el futuro.
La comisionada Kristen Rosen González propuso la medida a comienzos de este año, pero no ha sido hasta ahora que las autoridades han considerado necesario implementarla.
En declaraciones a medios locales, la Comisionada ha afirmado: «Queremos que las personas sepan que si vienes a Miami Beach y estás en el paseo marítimo, te estamos mirando».
Las autoridades creen que las cámaras evitarán el crimen y por ese motivo han expresado la intención de llevarlas a cada rincón del distrito de entretenimiento.
En su nota CiberCuba reseña que en general, las ciudades norteamericanas han extendido considerablemente la video vigilancia en los últimos años, y es que un sistema de cámaras de alta potencia permite a la policía ver detalles tan significativos como los números en un teléfono celular.
La ACLU, por su parte, considera que no hay evidencia de que las cámaras reduzcan el crimen y que la vigilancia puede tener un «efecto escalofriante en la vida pública», con personas cada vez más cohibidas.
Y añade que «aunque la ACLU no tiene objeciones a las cámaras en lugares públicos específicos y de alto perfil que son posibles objetivos terroristas, como el Capitolio de los EE. UU. […] el impulso de cubrir nuestros espacios públicos y calles con video vigilancia es mala idea.»
Ante el cuestionamiento de la privacidad, Rosen González ha dicho: «¿Es una situación ideal? Quiero decir, no lo es. Pero estamos haciendo nuestro mejor esfuerzo para proteger a los residentes y turistas, para mantener a las personas a salvo».
A ello se suma la polémica sobre si realmente está subiendo el nivel de criminalidad: los Comisionados creen que sí, aunque el Departamento de Policía de la ciudad cita cifras que muestran que los principales crímenes en la zona cayeron casi un 16 % en 2016, y un 11 % adicional en los primeros seis meses de 2017.
Instalar cámaras a lo largo del paseo Ocean Drive y en el distrito de entretenimiento, costaría aproximadamente un millón de dólares.
Fuente: CiberCuba