(Miaminews24).- Una llamada anónima al 911 en la que una persona no identificada alertaba que tres supuestas bombas estallarían en un período de 30 minutos en diferentes establecimientos de la ciudad Doral, terminó con la captura del hombre, que ahora deberá responder por tres cargos.
Eran las 8:08 p.m. el 15 de septiembre, el mismo día en el que se registró el atentado terrorista en Londres en el que una bomba explotó en uno de los vagones del metro.
El hombre aseguró en la llamada que los lugares en donde supuestamente los explosivos estaban ubicados eran tres restaurantes de Doral: Bulla Gastrobar, Dragonfly Izakaya & Fish Market y Piola.
Oficiales de la Policía y detectives ordenaron a esa hora la evacuación de los tres establecimientos y de los locales comerciales más cercanos como medida preventiva y se procedió a la búsqueda con perros entrenados para detectar el olor de los explosivos, según el reporte de la Policía de Doral.
Luego de una extensa búsqueda, las autoridades no encontraron ninguna de las supuestas bombas. Tras hacer un seguimiento y rastreo a la llamada, las autoridades lograron identificar el número, el cual pertenecía a Demond James, un empleado del restaurante Dragonfly, de 39 años.
Al ser cuestionado por las autoridades, James confesó que había llamado a reportar la amenaza de bomba.
“El hombre afirmó que planeaba volar el restaurante para suicidarse. Si no podía crear la explosión, planeaba obligar a los oficiales a que le dispararan”, señaló la Policía en el reporte del caso.
James tiene antecedentes penales que incluyen una detención anterior también por amenazas de bomba y fue acusado de tres cargos: amenaza de bomba, uso ilegal de dispositivos de comunicación y uso indebido del 911.
Con información de El Nuevo Herald.
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