Suspendieron licencia a asilo donde murieron nueve ancianos

1058

(Miaminews24).- La Agencia para la Administración de la Salud (AHCA) emitió el miércoles una orden de suspensión de emergencia sobre la licencia del Rehabilitation Center of Hollywood Hills. Ese organismo el 13 de septiembre había emitido una moratoria temporal para las admisiones que impedía el aceptar nuevos pacientes.

La agencia también había iniciado en esa fecha una investigación sobre el centro de atención y los resultados preliminares han demostrado que una suspensión urgente y permanente de la licencia está justificada y es necesaria, según informó ese organismo en un comunicado.

La medida, precisó la AHCA, suspende la capacidad de operar un ancianato y prohíbe la admisión de nuevos pacientes en las instalaciones.
Los residentes no recibieron atención médica oportuna

Explicó que las conclusiones iniciales muestran que los residentes de las instalaciones no recibieron atención médica oportuna debido a que los profesionales del centro se demoraron abrumadoramente en llamar al 911.

Asimismo, los pacientes no fueron evacuados oportunamente al hospital con aire acondicionado que se encontraba al cruzar la calle, agregó.

Los pacientes terminaron en el hospital con temperaturas de, por ejemplo, 109.9 grados Fahrenheit, 108.5 grados, 108.3 grados, y 107 grados, lo cual era demasiado tarde para que pudieran ser salvados, de acuerdo con esa agencia.

Las instalaciones también realizaron anotaciones tardías en los registros de los pacientes. “Las anotaciones tardías” fueron realizadas después que una enfermera visitara a los pacientes, y en consecuencia, presentan una ilustración inexacta sobre la situación en las instalaciones, dijo la AHCA en el comunicado.

“Las instalaciones le fallaron a sus residentes en numerosas ocasiones a lo largo de este horripilante calvario. Es incomprensible que profesionales médicos no sepan que hay que llamar al 911 de inmediato en una situación de emergencia”, manifestó Justin Senior, Secretario de esa agencia.

Fuente: El Nuevo Herald