(Miaminews24).- Originalmente investigado como un supuesto robo residencial que acabó con tres primos mortalmente baleados, la policía de Chicago intenta confirmar la versión de los hechos luego de que el caso dio un giro inesperado…
Tres primos perdieron la vida tras ser baleados por el dueño de una casa en el vecindario de East Side luego de que según este irrumpieran por el sótano para presuntamente cometer un robo.
La policía confirmó que Narciso J. Ledesman de 22 años, Celeste Ledesman de 24 y Antonio J. López de 17 años murieron en el acto tras el tiroteo en una casa en la cuadra 10200 S. Ewing. en un vecindario predominantemente hispano.
La policía dijo que el dueño de la casa de 31 años y quien cuenta con permiso para portar un arma, afirmó que hizo los disparos en defensa personal pues pensó que todo se trataba de un robo.
Sin embargo en un intento por confirmar la versión de los hechos y si la balacera se trató de un caso de defensa personal detectives interrogaron fuertemente al hombre el cual ese mismo día contrató un abogado.
«Hemos notado inconsistencias en su historia. . . estamos presionando bastante duro para poder confirmar los hechos», dijo el portavoz de la policía Anthony Guglielmi
Guglielmi no pudo decir qué tipo de arma se recuperó en la escena y tampoco si los presuntos intrusos estaban armados al momento en que supuestamente entraron a la casa entre la calle 103 y Ewing.
“Estamos en medio un interrogatorio,” dijo Guglielmi, señalando que no podía compartir más detalles. “Estamos insistiendo para poder confirmar los hechos”. dijo la policía.
Pero el caso dio un giro inesperado cuando familiares de los tres primos dijeron a Telemundo Chicago que el hombre que jaló el gatillo era amigo de la madre de dos de los que mató.
«Ellos no eran las personas que iban a entrar a una casa a robar… yo no puedo creer que eso sucedió» dijo Estela López, abuela de los primos.
Las mujeres alegan que tanto ellas como Celeste conocían al dueño de la casa hacía de cuatro a cinco meses, incluso habían mantenido una relación y sabían que el hombre portaba un arma con permiso.
«Por el simple hecho que ellos lo estén llamando como una invasión a la propiedad privada no tiene sentido… él conocía a cada uno de nosotros, conoció a mi mamá y quería a mi hijo.» dijo Teresa Zeaman madre y tía de los fallecidos. «Yo quiero justicia, él no debería de estar caminando libre ahora, debería estar detrás de las rejas porque él sabe que lo que hizo estuvo mal».
«No entiendo por qué hizo esto, como te dije él quería a mi hijo.» aseguró la consternada madre de Antonio de 17 años quien apenas antes de morir había conseguido su primer trabajo.
Antonio era primo de Celeste una madre de 24 años quien dejó huérfanos a tres niños.
Celeste también era hermana de Narciso de 22 años, un padre de dos niñas.
La oficina del forense dijo que Ledesma recibió un disparo en la cabeza, y López sufrió múltiples heridas de bala que los mató en el acto.
Mientras que el dueño de la casa continúa en libertad y por el momento no enfrenta cargos, dijo esta semana la policía.
El tiroteo ocurrió en la misma cuadra de la secundaria St. Francis y a pasos de la parada de autobús de 103 y Ewing muy frecuentada por los estudiantes de la zona.
La familia anunció que el sábado 19 de agosto se realizará una vigilia justo en frente de la casa en que fueron baleados (10251 Ewing Ave.) previo a los servicios fúnebres la próxima semana.
Fuente: Telemundo
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