(Miaminews24).- El papa ha alertado sobre los peligros de los «horóscopos y adivinos» ya que, a su juicio, si se confía en ellos en lugar de aferrarse a la palabra del Señor «se empieza a tocar fondo».
Durante el Ángelus celebrado este domingo en la Plaza de San Pedro del Vaticano, el máximo pontífice ha comenzado su intervención con el Evangelio (Mt 14.22 a 33) que describe el episodio de Jesús en el que este va al barco de sus discípulos caminando sobre el agua pero Pedro duda de si es él o no. Al ir Pedro hacia él, este empieza a hundirse y Jesús acaba salvándole.
«Esta historia del Evangelio contiene un rico simbolismo y nos hace reflexionar sobre nuestra fe, tanto como individuos y como comunidad de la iglesia»
Apostilló el papa, que opina que la duda que tuvo Pedro con respecto a Jesús en este episodio puede surgir en la actualidad.
«A Pedro, en ese momento, no le pareció suficiente la palabra segura de Jesús, que era como la cuerda floja a la que tenía que sujetarse para afrontar las aguas hostiles y turbulentas. Esto es lo que nos puede pasar. Cuando no nos aferramos a la palabra del Señor, si para tener más seguridad se consultan horóscopos y adivinos, se empieza a tocar fondo», explica el papa, que atribuye esta duda a que «la fe no es tan fuerte».
Según ha indicado, el Evangelio de este domingo recuerda que la fe en el Señor y en su palabra no abre un camino «en el que todo es fácil y pacífico» pero ha defendido que la fe da «la seguridad de una presencia, la presencia de Jesús» que «incita a superar las tormentas existenciales, la certeza de una mano que se aferra a nosotros para ayudar a hacer frente a las dificultades, señalando el camino, incluso cuando está oscuro».
En este sentido, ha reconocido que aunque la fe «no es un escape a los problemas de la vida», sí «sostiene el camino y le da un sentido». «Este episodio es una imagen de la maravillosa realidad de la Iglesia de todos los tiempos», ha clamado el papa Francisco, que sostiene que la salvación se encuentra en «el valor y cualidades de sus hombres» y que «la garantía contra naufragio es la fe en Cristo y su palabra».
Fuente: 20 minutos