(Miaminews24).- La epidemia nacional de sobredosis de opioides está abrumando a los hospitales, y la información publicada el martes por el gobierno muestra que en un solo año hubo 1.27 millones de visitas a salas de emergencia e ingresos en hospitales por el consumo indebido de opioides.
Las cifras del 2014, las más recientes que se tienen a la mano de todos los estados y el Distrito de Columbia, indican un aumento de 64 por ciento en la cantidad de ingresos y un alza del 99 por ciento en tratamiento en salas de emergencias, en comparación con el 2005. Es muy probable que esta tendencia se mantenga si no se controla la epidemia.
El informe, emitido por la Agencia para la Investigación de los Servicios Médicos (AHRQ), coloca a Maryland en el primer lugar de la lista en los casos de pacientes ingresados por esta razón. Maryland, que ya batalla con una gran cantidad de sobredosis de heroína y opioides por receta, ha sido testigo de la propagación del uso del opioide sintético fentanil, que puede mezclarse con heroína y cocaína y es extremadamente potente. El gobernador Larry Hogan declaró este año un estado de emergencia en respuesta a la crisis.
Epidemia nacional de Opioides
Un informe estatal publicado este mes muestra que las muertes por opioides en Maryland casi se cuadruplicaron desde el 2010, y las muertes por fentanil aumentaron 38 veces en los últimos 10 años. En Baltimore City hubo 694 muertes por sobredosis de alcohol y drogas en el 2016, casi dos fallecimientos al día, y es un alza significativa en comparación con el 2015, cuando 393 personas fallecieron por sobredosis.
“Vemos sobredosis en todos los grupos étnicos, en todas partes”, dijo Leana Wen, comisionada municipal de Salud.
Wen firmó el 1 de junio una orden que permite la venta sin receta de naloxona, un antídoto efectivo contra ciertas sobredosis, y exhortó a la población a adquirirla. Wen afirmó que las nuevas cifras muestran un aumento en la atención de sobredosis en los hospitales no sorprendía y que muchas personas que solicitan tratamiento contra la adicción no pueden recibirlo de inmediato.
La amplia pero poco uniforme repercusión de la epidemia se refleja en las cifras. Texas, Nebraska y Iowa, por ejemplo, tienen un indice asombrosamente bajo de ingresos por sobredosis. Igual ocurre en California y la Florida. No está claro si la epidemia se extenderá o profundizará en lugares que por el momento no sufren el embate, al menos en comparación con regiones duramente golpeadas en Nueva Inglaterra y la Appalachia.
Fuente: The Washington Post
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