(Miaminews24).- El último de los monumentos confederados una estatua del general Robert E. Lee que miraba desafiante hacia el norte con los brazos cruzados que durante décadas figuraron entre los sitios emblemáticos más antiguos y consolidados en el paisaje de Nueva Orleans, fue retirado en medio de una controversia a veces parecida a las divisiones de la Guerra Civil que recordaban.
Los otros símbolos que permanecieron incólumes hasta hace poco fueron un obelisco de piedra que proclamaba la supremacía blanca y otras dos estatuas de incondicionales confederados.
A medida que la estatua de Lee era levantada el viernes, la multitud estalló en vítores mientras grababa con sus celulares ese momento de la historia. Los presentes se estrecharon las manos en señal de felicitación. Muchos en la multitud aguardaban desde la mañana.
“¡Nunca creí ver este día!”, gritó jubilosa Melanie Morel-Ensminger. “¡Pero vean! Está sucediendo”.
El monumento a Lee fue el último de cuatro dedicados a personajes confederados cuyo retiro se efectuó de acuerdo con una propuesta del alcalde Mitch Landrieu, la cual fue aprobada por el consejo municipal en 2015. Corona un proceso de casi dos años que ha sido censurado por quienes los consideraban parte del patrimonio del sur y un homenaje a los muertos.
Los contratistas que participan en el proceso de remoción han sido amenazados; y los partidarios de las estatuas demandaron en repetidas ocasiones para que siguieran en el mismo lugar.
Sin embargo, la acción fue elogiada por quienes veían a esas estatuas como reminiscencias brutales de la esclavitud y símbolos de la opresión histórica de las personas negras.
Fuente: Voz de América