(Miaminews24).- Cuatro congresistas del sur de la Florida expresaron su apoyo al conjunto de sanciones que el gobierno de Estados Unidos aplicó contra ocho jueces del Tribunal Supremo de Venezuela que apoyaron la decisión de quitarle todas las funciones a la Asamblea Nacional, que está bajo el control de la oposición.
La congresista republicana Ileana Ros-Lehtinen mencionó que algunos jueces de la Corte Suprema han sido por un tiempo “títeres del régimen, para el régimen de Chávez y ahora para el régimen de Maduro”.
Régimen de Maduro confisca el pasaporte del opositor Henrique Capriles
“De hecho, el sistema judicial venezolano bajo Maduro ha sido nada menos que corrupto, ya que el Tribunal ha ayudado a silenciar a la oposición, encarcelar a opositores del régimen, e intentar despojar de los poderes legislativos a los representantes debidamente elegidos a la Asamblea Nacional”, dijo en un comunicado.
“Aplaudo la decisión del Tesoro de aplicar estas sanciones. Es un paso en la dirección correcta para responsabilizar al régimen de Maduro y envía un fuerte mensaje al pueblo de Venezuela que no hemos renunciado a sus aspiraciones de un retorno al verdadero orden democrático”, señala la congresista, que anunció el 30 de abril su retiro tras más de 27 años de servicio.
Ros-Lehtinen formó parte de un grupo bipartidista de congresistas y senadores que le pidió a Trump en febrero que emitiera sanciones contra el gobierno de Maduro por violación de derechos humanos y por estar apoyado por funcionarios acusados de narcotráfico.
La congresista demócrata Debbie Wasserman Schultz, que formó parte de ese grupo, también apoyó las sanciones emitidas el jueves.
“La tragedia humanitaria que se está desarrollando en Venezuela es una afrenta para todos los que creen en la libertad, la democracia y la justicia, y es terrible que los miembros del Tribunal, cuya tarea es proteger estos valores, estén contribuyendo a su erosión”, dijo Wasserman Schultz. “Es un paso en la dirección correcta y exhorto al presidente Trump para que use todas las herramientas diplomáticas para apoyar los valores democráticos y los derechos humanos en Venezuela”.
Por su parte Mario Díaz-Balart, congresista republicano, indicó que las sanciones son una respuesta a la escalada de abusos y represión del gobierno venezolano, que junto a las declaraciones de la embajadora de EEUU en la ONU el jueves, Nikki Haley, son una fuerte condena a la “tiranía del régimen de Maduro”.
“Maduro encarcela a sus opositores políticos, censura a los medios de comunicación, corrompe las instituciones e instiga la violencia contra los manifestantes, y felicito al presidente Trump por tomar, una vez más, una posición firme a favor del pueblo venezolano”, dijo el congresista cubanoamericano.
El también republicano Carlos Curbelo unió su voz a los de sus colegas del Congreso y expresó su respaldo a las acciones del gobierno de EEUU por solidarizarse con el pueblo de Venezuela.
“Con estas nuevas sanciones, la administración (de EEUU) está enviando una advertencia a Nicolás Maduro y a sus delincuentes. Estados Unidos ya no va a estar mirando como Maduro distorsiona y manipula la Constitución de Venezuela para que pueda continuar violando los derechos humanos del pueblo venezolano”, dijo Curbelo.
“Exhorto a todos nuestros aliados en el hemisferio para que se unan a Estados Unidos en este esfuerzo”, añadió.
Fuente: El Nuevo Herald