(Miami News 24).- Ha sido un duro andar para los Marlins desde el inicio de la zafra, especialmente los últimos 17 días. Sin lugar a dudas perder 12 de los últimos 15 encuentros dejaría a cualquiera desanimado y un tanto taciturno con la situación. Sumado a esta mala racha, desde el ocho de mayo se han enviado seis jugadores a la lista de lesionados y el cuerpo de lanzadores se mantiene como la gran duda para el manager Don Mattingly.
Dos de los abridores de la rotación de Miami se encuentran en lista de lesionados Edinson Vólquez (0-4) y Wei-Yin Chen (2-1). El taiwanés es el único que posee marca positiva de los cinco lanzadores principales y cuenta con la segunda mejor efectividad (4.33) luego de 27 entradas de labor. La ausencia de Vólquez aunque también pesa para la organización, puede ser sopesada -a la larga- con un buen lanzador de ligas menores.
Durante la actual zafra, Vólquez se ha mostrado como el pitcher con menos control. Un alto WHIP de 1.814, más las 22 bases por bolas en tan solo 28 entradas, son síntomas de que su salida de la rotación podría estar cerca. Al estar nuevamente en acción y no hacer los correctivos pertinentes, es poco probable que Vólquez se mantenga abriendo encuentros para los Marlins.
Una posible solución sería Matt Tomwshaw de 28 años, quien ha tenido una buena actuación en 2017 con el Jacksonville Jumbo Shrimp, filial AA de los Marlins. En siete aperturas cuenta con récord positivo de 3-1, además exhibe la segunda mejor efectividad para cualquier abridor de esta con un mínimo de cuatro salidas al morrito en tal organización.
La mejor opción para ser llamado era Dillon Peters, serpentinero siniestro de 24 años, pero el pasado 18 de abril se fracturó el pulgar y estará lejos del terreno varios meses. En tres aperturas con el Jacksonville dejó balance de dos ganados y uno perdido. Actualmente Peters es el quinto prospecto de los Marlins.
Con urgencia los Marlins necesitan reestructurar su pitcheo abridor, o buscar una solución inmediata. La efectividad colectiva del bullpen no es mala, en 138.1 innings han permitido 56 carreras para un 3.65. Además cuentan con ocho de las 20 derrota, los otro 12 reveses están a cargo de los abridores y un tercio de ellos son solamente de Edinson Volquez. Dan Straily y Adam Conley cuenta cada uno con tres perdidos, por lo que se deben trabajar para mejorar lo ocurrido con estos tres brazos.
El promedio de carreras limpias permitidas de los abridores es un alarmante 5.21, por lo que Juan Nieves (coach de pitcheo) deberá reunirse con Don Mattingly para realizar los ajustes necesarios.
El bateo sí ha respondido
En las 12 derrotas recientes los Marlins han impulsado un promedio de tres carreras por encuentro, mientras que el pitcheo ha tolerado 6.6 carreras por partido. Dejando así claro que el la falla no está en los maderos.
De los bateadores que acumulan un mínimo de 40 turnos legales en lo que va de contienda, el average colectivo de la novena de Miami está en .276, al conectar 289 imparables en 1046 visitas al plato.
Hoy los Marlins vuelven al terreno y le tocará al dominicano José Ureña apaciguar aún más los maderos de los Bravos de Atlanta, novena que marcha última en la División Este de la Liga Nacional.
Rafael A. Flores Villegas