(Miaminews24).- Cuando Julio Bevione nos muestra su intención del día, siempre hay alguien que diga “amen” a su palabras justas, gentiles y elocuentes sobre la toma de decisiones, manejo de la cotidianidad, afectos, libertad y evolución personal.
Es comunicador y autor de once libros de temáticas espirituales. Nació en Villa Santa Rosa, Córdoba, Argentina, en 1972 y desde 1997 su sede es Nueva York.
“Vivir en La Zona”, “52 semanas para Vivir en La Zona”, “¡Qué maravilla!, Mis primeros pasos en la espiritualidad” junto a Sebastián Carignano (género infantil), “Abundancia, vivir sin miedos” , “Aceptación, vivir en paz” , “Relaciones, vivir en armonía”, “Silencio, Vivir En El Espíritu”, estos últimos como parte de la colección “En La Zona”, así como “Respira… y Sal de tu Crisis”, “Espiritualidad, para una vida más fácil, simple y abundante” y “La vida en 5 minutos”, son algunos de los libros que junto con su constante presencia en notas periodísticas y programas de TV, así como sus charlas multitudinarias y sus Spiritual Boot Camp ( retiros de 3 días y 4 días, en los que grupos reducidos de asistentes son guiados personalmente por Bevione), lo han hecho un influenciado de primera línea.
Aún sin haber experimentado una visión o un hecho conmovedor, ¿En qué momento Julio Bevione sintió que podía elevar su voz para que otros se conectaran con lo mejor de sí mismos?
-Cuando viviendo en Miami, compartía con varios grupos de crecimiento personal y vi la dificultad en recibir los conocimientos por parecer muy complejos. Eso me movió a servir de otra manera más activa. Aunque desde niño mi pasión es acompañar a otros para que se ordenen y puedas ver con más claridad un problema, y su solución.
¿Cómo construiste el sistema de herramientas y recursos que hoy pones a mano de todas las personas que buscan armonía?
-Observando mucho. Soy autodidacta y no he querido formarme, en el sentido educativo. Sino ir despertando mis dones y mi talento, en el ejercicio diario, en la práctica. Al observar, escuchar, estar a disposición del otro, la información va llegando y todo va ocurriendo.
Todos tenemos un maestro, un guía, alguien que nos dio el GPS para acercarnos a la ruta correcta.
¿En tu caso quién fue ese tutor?
-No lo he tenido. Me hubiera gustado tenerlo, sobre todo al principio de este camino. Tengo como referencia a Wayne Dyer, que es un autor norteamericano, pero no fue mi tutor, solo la inspiración, quien me mostró una manera simple de hacer este camino.
En ese mismo sentido, leía que el cielo y el infierno comienza en nuestro interior, pero que ocurre cuando en el exterior hay atentados, dictaduras, crímenes de odio… ¿Cómo hacer para que no nos toque esa constante exposición a la rabia y la revancha, que parece cada vez más próxima por el dominio de internet y sus redes sociales?
-Cambiando nosotros. La dictadura, los atentados, los crímenes, no son ajenos a quienes los viven. Ni cayeron del cielo o llegaron ajenos a esa sociedad. Es la conciencia social la que permite, o no, que eso ocurra. Justamente por eso lo único que puede cambiar el entorno es el cambio de conciencia. En una sociedad donde hay tolerancia es imposible que un intolerante llegue a ser líder. El problema se ve en el líder, el lo hace visible, pero sus raíces están regadas por la sociedad.
Siempre me ha preocupado lo que se transmite de adultos a jóvenes como legado, ¿Cómo iniciamos a un “chamo” apegado a su video game o al chat o instagram, en el conocimiento de sí mismo y su poder interior?
-No vayamos en su contra, sino busquemos la manera de compensar eso. Si un niño vive en un hogar donde los videos games son más interesantes que la vida en esa casa, el problema no es el video game, sino lo que está pasando en esa casa. Un niño educado con valores, que le hacemos sentir su valor dándole confianza en sus decisiones, que ve en su entorno eso valores, no solo es la prédica, ese niño difícilmente sea violento. Pero, al igual que con los problemas sociales, ponemos la responsabilidad en quien no la tiene. Si hay padres con valores y una conducta donde el miedo no los consuma, los niños serán libres de cualquier tóxico social.
¿En qué lugar soñado te gustaría realizar un spiritual boot camp?
Lo hice, en el desierto de Arizona. No tengo otro lugar nuevo en mente pero de aparecer, allá iré.
¿En qué momento el ser humano se acerca realmente a dios?
Generalmente, cuando sus recursos humanos limitan. Ante una crisis, una pérdida, la enfermedad o alguna dificultad donde nos sentimos impotentes. Allí aparece la humildad, que es fundamental para poder conocer y reconocer a Dios.
VENEZUELA ES UNA PRINCESA ENCERRADA EN UN CASTILLO
Venezuela está hecha un mundo de conflictos, antagonismos, vemos al opuesto político como un enemigo al que hay que borrar del planeta, la mitad de la nación piensa que la otra mitad estorba, hay una creciente cultura del odio y pensamos que la felicidad sólo es posible fuera de nuestras fronteras ¿Si mi país fuera una persona, cuál sería el diagnóstico y la solución para sus desequilibrios?
-Una vez, en una conferencia, hablé de esta analogía. Venezuela es una princesa encerrada en un castillo. Se la pasa mirando hacia afuera, por la ventana, esperando que alguien venda a rescatarla, espera por dos príncipes que vengan por ella, cuando, si dejara de mirar por la ventana hacia afuera y mirara su castillo, y se viera al espejo, de daría cuenta que ya es una princesa y no necesita de nadie que la rescate, porque ser valiosa por ser quien es. En definitiva, el venezolano, cuando reconozca sus verdaderas raíces y las integre, cuando reconozca lo valioso que es, dejara de poner su poder en otros y asumirá su grandeza.
¿Y en el caso de Estados Unidos cómo sería ese diagnóstico o terapia para alguien que hoy parece preocupado por cada vecino que quiere visitarlo?
-En Estados Unidos el miedo cobró fuerzas, siempre estuvo pero ahora se magnificó. No hay que temer porque el poner más leña al fuego. Hay que hacer las cosas como la ley lo dicen e ir por el camino correcto. Afortunadamente, la ley tiene peso por sobre las mezquindades de sus líderes. Confiemos.
EN PRIMERA PERSONA
Si fuera un X-Men , mi poder sería:
Aliviar el dolor de lo que sufren, para que no se distraigan en esas emociones y se sientan libres de elegir algo mejor.
Lo más argentino que tengo es:
Bailar tango, vibrar con el tango. Y de alguna manera mi carácter, mi personalidad.
Mi ritual o hábito favorito es:
Caminar. Lo hago hasta que el cuerpo aguante. Donde estoy, siempre camino. Es una manera de mover cuerpo y mente, y conectar con los lugares y las personas.
El recuerdo de infancia o adolescencia que podría convertir en una película es:
¿Habrá alguno?…quizás mi etapa de monaguillo en un templo muy antiguo, todo era muy cinematográfico.
Mi Dios es:
Mi Dios es Dios, que no es mío, sino de todo lo que existe.
COORDENADAS
Web site: http://juliobevione.com/mundo-bevione/
Instagram: @bevione
Twitter: @JulioBevione
Facebook: bevionejulio
YouTube: Vivir en la zona
Por: Alberto Martínez
Miaminews24.