Pesado cubano cerca de alcanzar el título de la AMB

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(Miaminews24).- Lo que a muchos les cuesta una vida en el boxeo, Odlanier Solís (22-3, 14 KO) pudiera alcanzarlo en muy poco tiempo, si son ciertos los reportes que llegan desde Alemania, donde el cubano se ha embarcado en un segundo aire para su carrera.

De acuerdo con la revista BILD, Solís enfrentará a Manuel Charr (30-4, 17 KO) el 11 de marzo por un título interino de la Asociación Mundial (AMB), un organismo donde ni siquiera aparece el nombre del pesado de Cuba.

Si esta pelea llega a darse, sería un tremendo golpe de efecto de parte de la compañía promotora de Solís, quien ha peleado en par de ocasiones -las dos en tierras germanas- desde que pusiera punto final a un controversial retiro.

Para Solís se trataría de una oportunidad increíble de asaltar la cima de su deporte por segunda ocasión, pues la faja interina le abriría las puertas de un título del mundo regular, actualmente vacante en la AMB.

El primer gran chance de Solís se produjo en marzo del 2011, cuando enfrentó también en Alemania por la corona del orbe al campeón del Consejo Vitali Klitschko, pero una lesión en una rodilla se transformó en una derrota por nocaut.

A partir de ese momento, Solís nunca fue el mismo y sus actuaciones dejaron mucho que desear, especialmente un par de derrotas contra un Tony Thompson semiprofesional y con 42 años en las costillas.

Tras la segunda derrota frente al estadounidense en febrero del 2015, Solís le comunicó a su antigua empresa, Arena Box, que se ausentaría de los cuadriláteros y se dedicó a realizar otros trabajos.

Pero en agosto del 2016 resurgió con un nuevo equipo encabezado por el turco Erol Ceylan y el hombre conocido en sus buenos como «La Sombra» inició el lento movimiento de regreso al ring.

Charr, por su parte, igualmente perdió la oportunidad de colocarse la faja mundial en la cintura al perder en septiembre del 2012 por nocaut contra Klitschko antes de comenzar un ciclo de descenso en su carrera.

Y ahora ambos están muy cerca de una corona del mundo.

Por: Jorge Ebro

Fuente: El Nuevo Herald

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