(Miaminews24).- Ante el empuje de los Suns, Miami cayó 99-90 para sumar su derrota número 26 en el inicio de una gira que habrá de conducirles ahora a Sacramento y finalmente a Los Angeles para medirse a Clippers y Lakers.
Goran Dragic fue el mejor del Heat con 24 cartones, mientras que Willis Reed lo secundaba con 22, pero eso no fue suficiente para superar al equipo con la segunda peor defensiva de la liga.
Miami comenzó el choque con mucha intensidad y en cierto momento parecía que impondría una tónica ganadora, pues obligaba a Phoenix a cometer muchos errores con movimientos rápidos en el aspecto ofensivo.
Sin embargo, los locales no perdieron la compostura y supieron reagruparse bajo las órdenes de su coach, Earl Watson, a la vez que poco a poco comenzaban a erosionar la ventaja del Heat.
Al final del primer parcial, el 29-28 en la pizarra todavía por Miami era una clara indicación de que la noche sería demasiado larga en el desierto de Arizona para un conjunto que llegaba con algunas piezas importantes en el casillero de los ausentes por lesiones.
Cabría preguntarse dónde hubiera estado el Heat si Dragic no hubiese terminado con la mejor primera mitad de su carrera al anotar 22 puntos para imponer una marca personal e impedir que su equipo cayera en las profundidades desde bien temprano.
El medio tiempo sorprendería a los de la Capital del Sol con su ventaja perdida por completo, mientras los Suns se iban al descanso con balance de 56-52 y con las armas afiladas para el resto del choque.
Para el tercer parcial venía la debacle y aunque Miami hizo esfuerzos desordenados por implementar algún tipo de ataque, los minutos del cierre se consumieron por puro trámite.
Fuente: El Nuevo Herald