(Miaminews24).- El triunfo contundente 34-13 de los Dolphins sobre los Jets de Nueva York mantiene al equipo de Miami vivo en la lucha por entrar a los playoffs.
Ahora, los Dolphins solo necesitan ganar sus próximos dos partidos ya que los Broncos perdieron 16-3 ante los Patriots este domingo y quedaron con marca de 8-6.
Con foja de 9-5, Miami es dueña ahora del segundo comodín de la AFC y este revés del equipo de Denver le da a posibilidad de decidir por sus propias manos su avance a los playoffs
Los próximos enemigos de los Dolphins son los Buffalo Bills, como visitantes; y los Patriots de Nueva Inglaterra, en el Hard Rock Stadium de Miami.
El triunfo contundente 34-13 de los Dolphins sobre los Jets de Nueva York, la noche del sábado en el MetLife Stadium en East Rutherford, Nueva Jersey, resolvió la gran incógnita de los Dolphins.
Ryan Tannehill, el quarterback titular y en gran momento, sufrió la rotura parcial en los ligamentos de la rodilla izquierda el domingo anterior en la victoria sobre los Cardinals de Arizona y quedó fuera de la campaña. No se sabía cómo iba a responder el suplente Matt Moore, quien la última vez que fue abridor fue en la campaña del 2011.
Moore fue el héroe de los Dolphins, el sábado. Dio cuatro pases de touchdown para Dion Sims (2), Kenny Stills y Jarvis Landry. Completó 12 de 18 pases para 236 yardas, fue derribado una vez e interceptado también una. Es un hombre que transmite confianza y mando.
Bajo la dirección de Gase, Landry acaba de superar las 1,000 yardas (1,031) luego de las 108 atrapadas el sábado y lo propio hizo Jay Ajayi con 1,007 luego de las 51 corridas contra los Jets.
Por su parte, Cameron Wake consiguió su primer intercepción en ocho temporadas en la NFL y se le considera que puede ser considerado como el regreso del año en la liga, luego de que en octubre del 2015 sufriera la rotura del tendón de Aquiles y se perdiera el resto de la campaña.
Lo más importante de los Dolphins de Gase es que saben responder cuando el peso de la responsabilidad así lo exige y eso revela que se trata del producto de un trabajo sólido, que puede llevar a Miami de vuelta a los playoffs por primera vez desde el 2008.
Por: Luis F. Sánchez/ el Nuevo Herald