(Miaminews24).-Jeff Wood, de 42 años, fue detenido en enero de 1996 por su papel en el robo y asesinato de un empleado de gasolinera.
De acuerdo con el reo, su amigo Daniel Reneau y él planeaban robar en una gasolinera, pero su cómplice inesperadamente cambió de idea y mató a uno de los empleados.
En el momento de producirse el crimen Wood estaba esperando dentro de su auto a la entrada de la gasolinera. Entonces fue amenazado por Reneau, que le advirtió de que mataría a su hija si no le ayudaba, por lo que se vio obligado a llevarse la caja con el dinero del establecimiento y abandonar el lugar. Wood fue condenado por haber permitido el crimen y no asistir a la víctima.
«Creo que ninguna persona en la historia moderna de la pena de muerte ha sido ejecutada con menor culpabilidad y participación en un asesinato que en el caso de Wood», dice Jared Tyler, abogado de Jeff Wood.
A pesar de que Wood solo sirviera de chófer del autor material del asesinato, fue condenado a muerte debido a la llamada regla del ‘homicidio preterintencional’ del estado de Texas que supone que un cómplice también puede ser condenado a muerte (incluso si las circunstancias cambian en contra de su voluntad). Si nada lo impide, se convertirá en una de las pocas personas en la historia de EE.UU. que será víctima de la pena capital sin haber cometido un asesinato.
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