(Miaminews24).- El anuncio hecho este jueves por el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, trajo consigo diversas opiniones dentro de la comunidad cubana en el sur de la Florida, quienes en su mayoría ven con escepticismo que la visita del mandatario a la isla vaya a generar un impacto positivo en la calidad de vida de sus habitantes.
Muchos ciudadanos de origen cubano en Miami ya han dicho por diversos medios de comunicación que era necesario un entendimiento entre los gobiernos de ambos países, en aras de contribuir con el desarrollo económico que necesita la isla, en la que se instauró un estado socialista hace más de cinco décadas. La historia refiere que un solo presidente norteamericano en funciones ha pisado el suelo cubano desde 1928 cuando lo hizo Calvin Coolidge.
«Simplemente pasará a ser una visita histórica, solo eso», dijo a Miaminews24 el joven cubano Rafael Hernández, quien llegó a Miami hace cuatro meses luego de una travesía de más de dos años por América Latina, donde vivió detenciones y se le negó tramitar una residencia por asilo político. Hernández, un opositor de 27 años, ya había dicho en México que no huyó de Cuba con la intención de ir a los Estados Unidos, sino a cualquier país hispano donde se le permitiera vivir y ejercer su carrera de abogado. «Yo más que nadie sé que ni Obama, ni ningún presidente del mundo le concederá a Cuba el derecho más fundamental de todos los seres humanos que es la libertad», sostuvo Hernández.
Diversas opiniones fueron recogidas en las inmediaciones del restaurante Versailles, un símbolo de la comunidad cubana ubicado en la calle ocho de la ciudad de Miami. «Queremos ver qué es lo que dirá el presidente Obama en Cuba», exclamó Fran Acosta, un inmigrantes de la primera década de Fidel Castro. «No creo que Obama irá para allá a hablar de las violaciones de los derechos humanos, ni de los problemas sociales y tampoco va a llamar a la democratización del país».
Sin embargo, para Juan Carlos Cabrera lo más importante que debe ser tratado por los presidentes de Cuba y EEUU es el perdón de todas las personas que se fueron y de los que quedaron presos en la isla. «Yo tengo casi ocho años desde que llegué en balsa a este país y aún no he podido ir a ver a mi familia», dijo Cabrera, quien se debe regir por la ley de repatriación cubana, la cual establece un castigo de ocho años para el que huya en balsa. «Es necesario que Obama hable sobre este tema con Raúl y perdonen tanto a la gente de aquí como a los que están allá y podamos vivir como buenos vecinos, aceptando nuestras diferencias» añadió Cabrera.
Muchos ciudadanos se enfocan en los alcances que ha tenido el embargo estadounidense sobre Cuba, asegurando que lo próximo debe ser su levantamiento, para poder comenzar a ver una mejoría real de la economía. «Queremos una prueba fehaciente de que el gobierno americano levantará el bloqueo económico que tanto daño ha causado al país», sostuvo Paola Celpa, una americana de padres cubanos que también acababa de salir del Versailles.
Si bien es cierto que las relaciones entre Cuba y Estados Unidos comenzaron a mejorar en 2014, fue hasta esta semana que se tomó una de las acciones iniciales que era el restablecimiento de los vuelos comerciales entre ambos países, una decisión que beneficiará a la población cubana en USA, la cual únicamente podía viajar en vuelos tipo charter que difícilmente se conseguían.
Washington anunció que durante su visita del 21 y 22 de marzo a La Habana, el presidente Barack Obama no se reunirá con el ex mandatario Fidel Castro, principal protagonista de la historia de Cuba de los últimos 57 años.
Por Héctor Labrador/Miaminews24