(MiamiNews24).- El presidente de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, garantizó hoy a los miles de emigrantes cubanos que se encuentran varados en este país desde el 14 de noviembre que su Gobierno hará todo el esfuerzo para que lleguen a Estados Unidos, su destino final.
«Vamos a hacer todo lo necesario para que estas personas vayan a su destino y mientras que estén aquí vivan con dignidad», declaró el mandatario en una rueda de prensa luego de una actividad oficial en San José.
Solís aseguró que tras la oposición de Nicaragua a permitir el paso de los isleños, Costa Rica está realizando contactos bilaterales con los otros países involucrados en la ruta migratoria de estas personas, para buscar una solución, sin embargo, el mandatario advirtió que su viaje a Estados Unidos será un proceso que tomará tiempo.
Miles de cubanos quedarán varados de forma indefinida en la frontera de Costa Rica después del fracaso el martes de una cumbre regional, en la que Nicaragua reiteró su negativa a dejar pasar por su territorio el creciente flujo de migrantes de la isla que busca desesperadamente llegar a Estados Unidos.
Más de 3.000 cubanos aguardan en el paso de Peñas Blancas, al norte de Costa Rica, después de que Managua cerrara la ruta que este año recorrieron más de 20.000 compatriotas para migrar al norte, espoleados por el miedo a que el deshielo entre Washington y La Habana acabe con sus privilegios migratorios.
El canciller de El Salvador, Hugo Martínez, dijo que cada país anunciará unilateralmente su postura al respecto, después de que no se llegara a una solución de consenso en la cumbre del Sistema de Integración Centroamericana (SICA), a la que también asistieron Colombia, Cuba, Ecuador y México.
El Gobierno del ex guerrillero Daniel Ortega, cercano aliado de La Habana, responsabilizó a Costa Rica y a Estados Unidos por el problema migratorio y reiteró que mantendrá su frontera cerrada como hizo el 15 de noviembre, cuando el Ejército impidió el paso a los isleños utilizando gases lacrimógenos.
La crisis se originó después de que la policía costarricense desmantelara una poderosa banda de tráfico de personas, rompiendo la cadena que llevaba a los migrantes por escalas en una peligrosa ruta de miles de kilómetros desde Ecuador hasta la frontera norte de México.
El Gobierno de Raúl Castro ha dicho que el responsable último de la situación es Washington y sus políticas que incentivan la migración ilegal de los cubanos por su facilidad para obtener la residencia en Estados Unidos.
Con información de AFP