Gerald Green volvió a practicar con el Heat de Miami este sábado, luego de su ausencia prolongada que el equipo sigue siendo ocultando muy bien. Sin embargo, Green expresó su remordimiento por el incidente, sin ofrecer más detalles del mismo.
«Toda esta situación, para mí, fue un incidente que me da vergüenza de», dijo Green a wsvn. «Sólo estoy tratando de superar esta situación. No puedo disculparme lo suficiente con los residentes que viven en mi edificio, mis fans, mi familia y sin duda esta organización que me a cubierto la estalda», comentó el atletla que dice estar «listo para seguir adelante».
La suspensión de Green por «conducta perjudicial para el equipo», le costó alrededor de $ 25.000.
Se sabe que todo comenzó el 3 de noviembre, cuando Green reportó estar enfermo durante un partido contra Atlanta. Al día siguiente, de acuerdo con la policía de Miami, Green fue al vestíbulo de su edificio de apartamentos con las manos ensangrentadas y le pidió ayuda a un trabajador de la recepción. Luego cayó en una rampa de valet parking al lado de las puertas delanteras, dio un puñetazo al hombre que lo ayudaba, y comenzó a luchar con las autoridades quienes tuvieron que esposarlo para llevarlo al hospital.
Green fue hospitalizado durante unas 24 horas. Luego se mantuvo en contacto regular con el equipo durante su ausencia, y no hay cargos relacionados con el golpe o con cualquier otro elemento del incidente.
El escolta promedió 10,3 puntos en los tres primeros partidos de la temporada. Se espera que Green juegue en el encuentro del martes frente al conjunto de Minnesota.
MiamiNews24