Con el 96,29% de las mesas escrutadas, Daniel Scioli, candidato por el oficialista Frente para la Victoria, se impuso con el 36,76% de los votos ante el 34,42% del opositor Mauricio Macri, postulante por la alianza Cambiemos.
Esto significa que por primera vez, los argentinos decidirán su máximo representante en una segunda vuelta electoral.
Según la Constitución, para ganar la presidencia argentina es necesario obtener más del 45% de los votos o que el ganador tenga una ventaja de 10 unidades porcentuales sobre su más próximo rival. En caso de que no se cumpla ninguna de esas dos situaciones, las dos fórmulas más votadas competirán en una segunda vuelta prevista para el 22 de noviembre.
Este domingo los argentinos acudieron a las urnas para votar en las elecciones generales de ese país para elegir presidente, vicepresidente y más de 140 escaños en ambas cámaras legislativas y decenas de parlamentarios de Mercosur, entre otros puestos a nivel provincial y municipal.
Macri tuvo la ventaja hasta el final
Más temprano, la junta electoral daba a conocer los primeros resultados presidenciales con el 73,84% de las mesas escrutadas, donde Mauricio Macri tenía el 35,73% de los votos, mientras Daniel Scioli, alcanzaba el 35,17%, y Sergio Massa del partido UNA el 21,19%.
Elecciones maratónicas para los argentinos
Y es que los primeros resultados oficiales aparecieron poco después de la medianoche de Argentina. La tardanza motivó a quejas de la oposición y numerosas denuncias en las redes sociales, aunque desde la Dirección Nacional Electoral advirtieron que no hubo una demora, sino «una espera de datos consistentes».
Más de 6 horas después de culminar la volación, tardó el organismo electoral del país suramericano en ofrecer los resultados preliminares.
CNN/MiamiNews24.