Las autoridades de Florida han decidido extinguir paulatinamente los botes deslizadores que recorren los pantanos del Parque Nacional de los Everglades con cientos de turistas diariamente.
El principal motivo que llevó a tomar la decisión es el fuerte ruido provocado por los deslizadores, y las molestias que causan a la fauna del parque.
Y es que los motores de los hidrodeslizadores causan un fuerte ruido que asustan a los pájaros, hasta el punto de que algunos abandonan sus nidos, además de interferir en el flujo natural del agua. Los hidrodeslizadores han estado operando en los Everglades desde hace 85 años.
Cerca de un millón de acres fuera del Parque Nacional de los Everglades podrían estar a disposición de los recreadores y dueños de estos deslizadores para continuar con su actividad turística. El más famoso humedal del planeta y símbolo de la defensa ambiental actualmente sobrevive en permanente amenaza por la contaminación del suelo, el desarrollo urbano desmesurado, el cambio climático y el aumento del nivel del mar.