Un segundo ataque con disparos de escopeta contra un grupo de personas dejó cinco víctimas heridas en la ciudad de Filadelfia, días después de otro incidente similar.
Los hechos más recientes ocurrieron el lunes en la tarde en una calle del vecindario de Kensington, donde había muchos adultos y niños afuera de sus casas debido al calor, según la policía.
El inspector Michael McCarrick dijo que un agresor masculino hizo varios disparos en la manzana, donde horas después de los hechos continuaban en las calles las sillas de jardín que habían usado para sentarse diversas personas.
Se recuperó una escopeta en el lugar y se busca al agresor. Una niña de 11 años sufrió varias heridas por rozadura de los perdigones.
Las autoridades continuaban la búsqueda de dos sujetos implicados en los disparos del sábado en la noche en el oeste de Filadelfia.
Un niño que apenas comenzaba a caminar y otras nueve personas fueron alcanzadas por los perdigones de un disparo de escopeta durante una parrillada al aire libre.
Cathy Dever, una residente de Kensington, dijo que escuchó lo que sonó como fuegos artificiales desde la manzana posterior a su casa y después vio a niños que gritaban y corrían.
Tina Jacobs dijo que también escuchó los disparos a media manzana de distancia.
«Los chicos de la manzana saben cómo maniobrar cuando escuchan disparos», declaró Jacobs al periódico The Philadelphia Inquirer.
El comisionado de la policía, Charles Ramsey, habló en términos muy severos sobre los responsables de los disparos en la ciudad.
«Evidentemente es un problema… que gente ande disparando así en las calles a la mitad del día; en un día bonito se hiere a niños; carece absolutamente de sentido», declaró el lunes Ramsey en el lugar de los disparos.
Fuente: noticias.univision.com